¿Su podcast todavía suena en blanco y negro? Aprenda cómo traerlo al presente
Hace 17 años nació el podcast y hay programas que se siguen haciendo como en los viejos tiempos. Vea qué hacer para dejar de sonar «a la antigua».
El oído, como la vista, es un sentido desarrollado para percibir las diferencias. Así como la mirada no se engaña a la hora de juzgar si una imagen es actual o anticuada, el oído también distingue a la perfección las construcciones sonoras modernas de las que se quedaron en el pasado.
La diferencia entre los podcasts que suenan según los parámetros más modernos y los que no es notable. Pero, ¿por qué importa? Porque los oyentes no se quedan en el pasado y tener un podcast que sea interesante y actual desde lo sonoro es básico para competir por la predilección de la audiencia.
Para dejarlo claro: las películas no se siguen haciendo como en los inicios del cine. Las historias de hoy no se cuentan cómo se contaron las grandes historias de los siglos pasados.
Por supuesto, uno de las grandes maravillas del universo podcast es su variedad casi infinita y la libertad que tienen los creadores. Dicho esto, también cabe reconocer que los podcast que triunfan en la actualidad son (y suenan) diferentes. Por ejemplo, saben aprovechar los cambios de las principales plataformas, como Apple o Spotify.
Introducción rima con seducción
Todos los que hemos hecho un podcast nos hemos preocupado por cómo empezar. Es una pregunta que nunca se resuelve de forma satisfactoria ni duradera. Y eso está bien. Porque lleva a explorar opciones desde la creatividad.
Lo contrario, hacer siempre la misma introducción, tiene el sabor de la rutina. Y no de las que les gustan a los oyentes. Hacerlo es fácil, y por lo mismo, puede no ser suficiente.
Sobre todo, si es una introducción larga que no cumple con la función básica de atrapar la atención del oyente y causarle ganas de seguir escuchando.
Steve Goldstein lo ha dicho de forma contundente en una de sus columnas:
En los primeros días del podcasting, había algo pintoresco e incluso encantador en los inicios de espectáculos con los anfitriones e invitados divagando sobre sus mascotas, la cena, la ropa y el micrófono que estaban usando. Hoy en día, la mayoría de los oyentes han superado eso. Lamentablemente, muchos podcasters no lo son.
Como los buenos títulos o los grandes inicios de la literatura, los primeros 30 segundos de un podcast son determinantes para que el oyente decida dedicar 30 minutos (o más) y escuchar el episodio completo. Y esto tiene aún mayor importancia para captar nuevos oyentes.
Cuando alguien escuche su intro: ¿seguirá escuchando o seguirá adelante?
No hay tiempo que perder
Esta es una lección importante. De hecho, debería tener un lugar tan importante en el estudio de grabación como lo tuvo en su momento el aviso de «al aire». Podría remplazarlo y sería un recordatorio valioso.
Porque no hay tiempo que perder. Y esto aplica en dos direcciones:
- No desperdicie el tiempo del episodio.
- No haga perder tiempo al oyente.
Las buenas historias, las mejores narraciones, los cuentos bien contados se van construyendo desde la primera palabra. Nunca es una elección casual ni gratuita, pues a la vez que busca enganchar al espectador, sienta las bases para el desarrollo de la historia.
Y la mejor forma de tener un inicio potente es saber qué sigue, qué va a continuación. De esa forma, se puede dosificar la información a la vez que se incita la curiosidad, el interés, la sorpresa, el asombro o el humor.
Los oyentes determinan rápidamente si se quedarán. Los primeros 60 segundos (realmente los primeros 30 segundos) necesitan enganchar e involucrar a la audiencia y plantearle el beneficio de escuchar el episodio.
Póngasela fácil a los oyentes
«Entre las personas que buscan podcasts, el 32% no los escucha porque hay tanto disponible que no saben por dónde empezar. Es más, de los que ya son usuarios, el 50% no escucha más porque no sabe cómo encontrar los más relevantes para sus intereses”, explica Luis Collado, de Google.
Sin duda, el descubrimiento es uno de los mayores retos para los podcasters y para los oyentes. Por eso cada episodio debería ser como una primera cita (de las que salen bien). Al menos, los primeros 30 segundos.
También es fundamental que facilite la circulación de cada episodio con promociones atractivas en redes sociales. Y al mismo tiempo, le puede facilitar el ejercicio de evaluar qué tan atractivo puede llegar a ser un fragmento de 30 segundos de su podcast.